Para proyectores contamos con tres tipos de tecnologías el popular LCD (Liquid Crystal Display), DLP (Digital Light Processing) y el LCoS (Liquid Crystal on Silicon). En esta tercera opción se encuentran las implementaciones D-ILA (Digital Imaging Light Amplification), desarrollado y usado por JVC, y SXRD (Silicon Crystal Reflective Display), desarrollada y usada por Sony.
Los proyectores LCD utilizan una fuente de luz que pasa a través de tres pequeños paneles LCD, a los que se les asignan los colores rojo, verde y azul, para crear y proyectar imágenes.
La tecnología DLP, emplea una fuente de luz en combinación con una rueda de color y un chip DMD (Digital Micromirror Devices) fabricado por Texas Instruments. En este chip encontramos pequeños espejos inclinados, de modo que la luz atraviesa la rueda, se refleja en los espejos y alcanza la pantalla.
Por ultimo tenemos la tecnología LCoS, es la que cuenta con estas variantes, D-ILA y SXRD, se combina con las anteriores. El panel LCD dejan o no pasar la luz, y después se mirara en un dispositivo de SI (silicio) para componer la imagen, como en los DLP.
Estas son las bases de su funcionamiento, nos vamos a sus mas importantes diferencias. Estas son tecnologías de proyección de imágenes técnicamente ya en el mercado, aunque con el paso del tiempo sus diferencias han ido desapareciendo, cada una de ellas tiene sus pros y sus contras.
La tecnología LCD destacan por la naturalidad de los colores, ya que ofrece una luminosidad muy buena con las imágenes en color, más exigentes que cuando medimos el nivel de brillo del blanco. En su contra, no suelen ofrecer unos negros tan profundos y unos blancos tan brillantes como los mejores modelos DLP.
La tecnología DLP tiene entre sus bazas el nivel de contraste, la luminosidad global, nitidez y la generación de imágenes muy brillantes, lo que los hace un candidato a tener en cuenta en habitaciones con luz ambiental. Sin embargo, cuando explicábamos las bases de su funcionamiento, nombrábamos una rueda de color en combinación con un chip DMD, algo que encontramos en los modelos más asequibles, ya que los chips DMD son caros. Esta rueda provoca cierto ruido al girar y la fidelidad de color es inferior a la de los LCD. Si nos vamos a los modelos más premium, la rueda de color es sustituida por tres chips DMD, solucionando así el problema.
La tecnología DLP tiene entre sus bazas el nivel de contraste, la luminosidad global, nitidez y la generación de imágenes muy brillantes, lo que los hace un candidato a tener en cuenta en habitaciones con luz ambiental. Sin embargo, cuando explicábamos las bases de su funcionamiento, nombrábamos una rueda de color en combinación con un chip DMD, algo que encontramos en los modelos más asequibles, ya que los chips DMD son caros. Esta rueda provoca cierto ruido al girar y la fidelidad de color es inferior a la de los LCD. Si nos vamos a los modelos más premium, la rueda de color es sustituida por tres chips DMD, solucionando así el problema.
Por último, los proyectores LCoS, que por un lado intentan aunar las ventajas de las tecnologías LCD y DLP y por otro, minimizar sus defectos. De hecho, suelen ofrecer un contraste muy bueno, unos negros profundos, buen nivel de detalle en las zonas oscuras, y, algo muy interesante para cinéfilos: la matriz de píxeles apenas es visible. Su principal hándicap es el precio, ya que suelen ser más caros que los modelos equivalentes que utilizan las tecnologías LCD y DLP.
La idea de un proyector en un escenario doméstico está enfocada a disfrutar de series, programas y películas emulando la sensación de estar en una sala de cine, es decir, una pantalla grande con imágenes de calidad.
Si queremos aprovechar al máximo la resolución del proyector, hemos de tener claro cuál es la resolución de origen de la señal de vídeo para decantarnos por un modelo que la ofrezca de forma nativa.
En la práctica, teniendo en cuenta que un proyector es una inversión de presente y futuro y que el contenido que vamos a visualizar va a estar, como mínimo en HD, el punto de partida son los proyectores Full HD y 4K, en función de nuestro presupuesto.
En el mercado encontramos proyectores con resolución Full HD y 4K nativos, si bien a nivel doméstico existen modelos de JVC D-ILA que logran los 8K, pero no son nativos, sino que es un 4K nativo con la tecnología Pixel Shift, que ofrece buenos resultados.
Este truco mecánico consiste en desplazar los paneles de píxeles (de tipo 4K), de modo que su intersección genere una matriz virtual de mayor resolución. En este sentido, existe una mejora, pero no será igual a la resolución de una pantalla 8K nativa.
Dentro del espectro de proyectores domésticos también encontramos diferentes tipos de fuentes, que permiten generar la luz que necesitamos enviar hasta la pantalla de proyección, cada una de ellas con sus ventajas e inconvenientes.
A continuación, listamos una variada serie de propuestas de diferentes características. Hemos tomado las especificaciones técnicas de las webs de los respectivos fabricantes y, como ya hemos explicado en el apartado anterior, en algunos casos los datos relativos al contraste no han sido debidamente especificados. En este sentido, detallamos entre paréntesis si se trata de contraste nativo o dinámico. En los casos en los que no se especifica nada, creemos que se hace referencia al contraste dinámico.
Este proyector sencillo de Philips destaca por su bajo precio, facilidad de manejo y condición de smart, siendo una opción low cost para uso ocasional, aunque se quedará corto si quieres emular la experiencia del cine por su bajo brillo y contraste. Es capaz de proyectar hasta 65 pulgadas y viene con aplicaciones precargadas con el sistema operativo de la marca para ver contenido en streaming o transmitir contenidos desde el móvil.
Un proyector doméstico que destaca por su alto brillo y buen contraste en este rango de precios. Dispone de entrada doble HDMI para ofrecer conectividad digital multiplataforma, configuración sencilla y manejo intuitivo.
Modelo básico de Epson de fácil configuración con mando a distancia. Destaca por su luminosidad y la longevidad de su fuente de luz gracias al empleo de la tecnología LCD. Además de VGA, HDMI y USB, ofrece conectividad Wi-Fi.
Un proyector de fácil instalación para disfrutar del cine en casa con alto nivel de detalle. A pesar de emplear una lámpara de mercurio, su vida útil está optimizada para ser más larga
El proyector JVC DLA-N5 D-ILA produce imágenes con resolución 4K nativa de alta definición, es compatible con HDR10 y Hybrid Log Gamma. De fácil ajuste y configuración